Manu y Paola llegan a su cabaña del amor. Así empezó su fin de semana sin cámaras - 4 videos

Manu esperó a Paola en la calle para dar un paseo con ella, hablar el tema de su desfile y ser él el que la llevara hasta la cabaña dónde la esperaban un montón de sorpresas. Manu bromeó con su pretendienta porque esperaba verla vestida igual que en plató, pero Paola le aseguró que todavía tenía unas cuantas sorpresas para él. Los jóvenes esperan de su encuentro en la cabaña disfrutar, conocerse mejor y en el caso de Paola que al tronista le gustara lo que veía y que el resto de pretendientas explotaran de rabia.

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Manu se prepara para su gran noche 
Paola quería que su cena con Manu fuera especial

Al ritmo de la canción de Raphael 'Mi gran noche', decidió no ser menos que Paola y prepararse para una ocasión tan especial. El tronista estaba convencido de que esa noche iba a triunfar y puso mucho empeño en ponerse guapetón. Paola también preparándose para la ocasión, estaba ansiosa porque comenzara su noche especial con el tronista. Sus expectativas eran muy altas.

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Paola y Manu, una cena calentita, calentita 
Paola: "¿Cómo no me voy a quitar la ropa con este calor?"

Manu preparó una cena especial con velas y pétalos de rosa, para disfrutar de una cena romántica con Paola y al ver entrar a su pretendienta guapísima con un impresionante vestido verde, tuvo la sensación de que había hecho muy bien. Los jóvenes empezaron a disfrutar de sus piezas de sushi, pero los calores que tenía Paola consiguieron que Manu se olvidara de la comida y se centrara en sus labios. Los multiples besos y un juego de seducción entre ambos, hicieron que el tronista tardara muy poquito en pedir al equipo que les dejaran un roto a solas.

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Paola, tras estar una hora a solas con Manu: "Yo estoy en éxtasis" 
Tras una hora sin cámaras en la cabaña

Aunque la intención de Manu y Paola era pasar toda la noche juntos y sin cámaras, el equipo de 'Mujeres y hombres' llamó a su puerta sesenta minutos después de dejarles a solas. Totalmente despeinada, recién duchada y con una ropa diferente puesta, Paola abrió la puerta todavía muy acalorada y asegurando que estaba en "éxtasis". Manu con cara de embobado y casi sin poder hablar, aseguró que había conocido cosas de Paola que no conocía hasta ese momento y que se lo habían pasado muy bien. Los jóvenes querían que su rato de intimidad continuara hasta que saliera el sol, pero tuvieron que conformarse con el ratito que habían disfrutado.